¿Cómo metes un sistema ergonómico complejo en una caja de zapatos? 🤔
Esa fue la pregunta que nos hicimos al comenzar el diseño de nuestro nuevo elevador de cubos para contenedores.
El proyecto tenía tres fases claras:
Especificación: El cliente (y el sentido común) exigían ergonomía total. Si no es cómodo para el usuario, no es un buen diseño.
Reto: El espacio. Teníamos restricciones dimensionales muy severas. Todo el sistema debía ser compacto, casi invisible.
Solución: Aquí es donde la ingeniería brilla. No podíamos usar mecanismos estándar por su tamaño.
El resultado: Diseñamos un mecanismo personalizado, muy ingenioso, que nos permitió compactar el movimiento sin perder fuerza ni fluidez. Ya hemos validado el prototipo funcional y opera suavemente, respetando la espalda del operario y todo en un tamaño reducido.
La ingeniería no es solo calcular, es resolver puzzles en 3D. 🛠️